Nicaragua conmemora este 23 de junio el Día del Padre. Y en esta ocasión diferentes organizaciones cívicas han recordado y rendido homenaje a aquellos hombres nicaragüenses que en medio de la represión del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo continúan con su lucha de exigir justicia y libertad para sus familias, especialmente para sus hijos.
Desde el exilio, Carlos Pavón recuerda aquel fatídico 19 de abril de 2018, día en que las fuerzas represivas del orteguismo asesinaron a su hijo, Richard Eduardo Pavón Bermúdez. Alrededor de las 6:30 de la noche, el joven se encontraba a unos 30 metros de la Alcaldía de Managua, cuando múltiples impactos de arma de fuego perforaron su tórax, brazo, rostro y cuello, provocándole la muerte.
Pese a que han pasado seis años desde el asesinato de su hijo, Pavón aseguró que «desde su pérdida nada volvió a ser igual». «Sigue doliendo. Es algo que no se superará nunca y no dejaremos de pedir justicia para quienes le arrebataron la vida cuando tan solo tenía 17 años», dijo en una entrevista realizada por la organización Voces En Libertad, en mayo del año pasado.
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Al igual que decenas de nicaragüense, Pavón aplicó al programa parole humanitario para migrar hacia Estados Unidos. Con tristeza, el padre de familia relata que «esta pérdida de nuestro hijo es bastante lamentable. Nos ha afectado mucho, a mí, a mi esposa y a mis otras hijas, porque Richard era un joven bien llevado, buen hermano, buen hijo, le gustaba hacer amistades, le gustaba jugar con sus hermanas, era bien dinámico y amado».
El padre expresó que el joven Richard dejó «un legado de amor al pueblo nicaragüense». «Vio que sus amigos y que otros que no conocía estaban en una lucha justa; y él decidió ser parte de eso. Nadie lo mandó, fue solo, sintió que su país lo llamaba, su patria lo necesitaba y ya ve, su amor por la patria fue tan grande que ofrendó su propia vida por Nicaragua», afirmó.
Desde la muerte de Richard Pavón, su familia ha sido asediada y perseguida. Ellos han defendido la acción de su hijo y se ha visto como un delito que exijan justicia. Cada cumpleaños; el 29 de octubre, cada aniversario de su muerte; el 19 de abril, han sido acosados y no han podido ir al cementerio y llevarles flores porque policías y paramilitares «los vigilan todo el tiempo».
En territorio estadounidense, Pavón empezó a trabajar para ayudar a su esposa y a sus dos hijas, pero «siempre mantendrá la resistencia y continuará exigiendo justicia por su hijo». «En cinco años no hemos visto nada, no hay investigaciones, no hay nada, y los jóvenes caídos merecen justicia y no repetición de todo lo que ha pasado», indicó.
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El joven del gorrito azul y blanco
Durante las protestas cívicas de 2018, el joven Edwin Carcache Dávila se destacó como un líder estudiantil comprometido en la lucha contra el régimen orteguistas. Sin embargo, en septiembre de ese año, el activista fue arrestado por el régimen y acusado de terrorismo y otros cargos relacionados con su participación en las protestas.
Su detención fue un golpe duro para el movimiento estudiantil, su familia y su padre, Edwin Carcache Bello. Durante su encarcelamiento, el líder estudiantil sufrió condiciones duras y estuvo sometido a torturas y condiciones inhumanas. La presión internacional y las negociaciones entre la dictadura y la oposición resultaron en su liberación en junio de 2019, junto con otros presos políticos.
A pesar de que antes del 2018 era un simpatizante sandinista, Carcache Bello «dejó» la bandera rojinegro tras los ataques contra Carcache Dávila. Desde el arresto de su hijo, el nicaragüense ha estado al frente de la lucha por la liberación de todos los presos políticos en Nicaragua. Como otros opositores, sufrió persecución y hostigamiento por su activismo, pero su voz continúa sin apagarse.
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Otros casos de ataques contra padres de familia han sido el joven Arturo Gómez García, quien falleció el 23 de junio de 2018, en Villa Austria, Managua. Posteriormente 11 miembros de su familia debieron salir de Nicaragua por las amenazas de grupos paraestatales.
Ese mismo día, un bebé de 14 meses fue asesinado de un disparo en la cabeza por grupos paraestatales en el barrio Américas Uno, de Managua. Nelson Lorío y Karina Navarrete, padres de la víctima, denunciaron el caso ante medios de comunicación y organismos nacionales e internacionales.
Tras días de acoso y a pesar de que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares a favor de Nelson Lorío, este fue detenido en abril de 2021. Tras su liberación, se vio obligado a salir de Nicaragua con su familia para salvaguardar su integridad física, sin recibir justicia por el crimen cometido contra su bebé.
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Crímenes contra los padres
El Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más considera a los padres nicaragüenses como «piezas importantes en el núcleo familiar» y «reconoce la labor de miles de ellos en la defensa de la justicia y la memoria por sus familiares asesinados en el marco de las protestas iniciadas en abril de 2018 en Nicaragua».
«Miles de padres nicaragüenses han sido apresados, criminalizados, encarcelados, torturados, desterrados, desplazados forzados y sus bienes confiscados, pero han continuado denunciando los abusos de derechos humanos que se cometen a diario en Nicaragua», asegura el organismo humanitario, en un informe publicado este domingo, 23 de junio.
De igual manera, la organización indicó que la dictadura orteguista «ha separado a miles de familias al desterrar o dejar en apatridia de facto a cientos de nicaragüenses que no pueden reunirse con sus hijos, hijas o esposas, con sus madres y padres» como el caso de las 222 y 94 personas desterradas y desnacionalizadas, en febrero de 2023.
El Colectivo reiteró que «todos los padres de hijos e hijas asesinados y todos los esposos o parejas de mujeres asesinadas, claman a diario justicia para sus seres queridos que, tras seis años, continúan en la impunidad. Este Colectivo tiene la firme convicción de continuar denunciando estos atropellos y crímenes cometidos contra los nicaragüenses».
En el Día del Padre nicaragüense, el Colectivo resaltó la importancia de los padres «en el cuido de la familia, su rol para erradicar la violencia machista, su papel en hacer una sociedad más justa, equitativa y abierta a la diversidad y su permanente trabajo en la denuncia de las violaciones de derechos humanos en Nicaragua, porque un pueblo sin memoria es un pueblo que nuevamente será víctima de gobiernos represivos y abusadores de derechos humanos».