El arzobispo de Oviedo, monseñor Jesús Sanz Montes, recibió el premio LIBERTAS Internacional 2024 delegado por el obispo nicaragüense monseñor Rolando Álvarez Lagos, que no pudo asistir presencialmente a la premiación que se realizó en el Principado de Asturias, en España.
Tras recibir el galardón, el arzobispo Sanz dijo en exclusiva al periodista Israel González, enviado especial de Artículo 66, que monseñor Álvarez ha pagado un alto costo por la libertad y que esta libertad es un ejemplo evangélico y cristiano.
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«… la libertad que nace del Evangelio y por la libertad que está en el corazón de un pueblo y por eso, en medio de una sociedad tantas veces mediocre y amoral, estos ejemplos nos llenan de alegría y nos estimulan, porque nos señalan el camino a seguir. Es un regalo para todos, este premio también lo significa», afirmó el arzobispo de Oviedo.
«Esperamos tanto que monseñor Rolando (Álvarez) y todos los nicaragüenses que están sufriendo el exilio puedan volver a una Nicaragua libre, democrática y en paz», añadió.
José Antonio Álvarez-Riesgo, escritor y presidente de la Asociación para la Participación de la Sociedad Civil “Oviedo 21”, que entrega los premios LIBERTAS, manifestó que este premio a monseñor Álvarez reconoce la tarea del obispo que ha dedicado su vida a sus principios religiosos y a la defensa de la libertad y la democracia en Nicaragua.
«El precio que él ha pagado al día de hoy ha sido un precio demasiado alto, pero gracias a Dios se encuentra actualmente en Roma y esperemos que dentro de poco pueda recuperar su actividad pastoral», afirmó Álvarez-Riesgo.
Elda Mata Miró-Sanz, presidenta de Societat Civil Catalana, una de las entidades galardonadas junto a monseñor Rolando Álvarez en la edición 2024 del premio LIBERTAS, manifestó que desde Cataluña observan con preocupación la falta de libertades públicas en Nicaragua.
«Con gran preocupación y tristeza vemos la situación actual en Nicaragua porque están luchando por su libertad, por los derechos fundamentales y eso nos hermana con con los catalanes que somos españoles constitucionalistas», explicó.
«Entendemos perfectamente el sufrimiento del pueblo nicaragüense que quiere volver a la democracia, el estado de derecho, al imperio de la ley, la libertad por encima de todo y a la igualdad entre los nicaragüenses», agregó.
El obispo desterrado
Monseñor Álvarez fue desterrado a El Vaticano el 14 de enero de 2024 tras más de 500 días en las cárceles de la dictadura. El régimen lo condenó a 26 años y cuatro meses de prisión, le arrebató la nacionalidad y le conculcó todos sus derechos civiles y políticos.
El obispo se resistió en dos ocasiones al destierro de la dictadura, pero finalmente habría cedido a una orden del papa Francisco para que saliera de Nicaragua y resguardar su integridad física. El prelado era una de las voces más incómodas para el régimen, lo que le valió persecución, cárcel y destierro.
Desde su destierro a Roma, monseñor Álvarez ha guardado silencio. No se le ha visto en ninguna foto u oficiando algún servicio religioso. Hasta la fecha el Santo Padre no lo ha removido de su cargo como obispo de Matagalpa.
Otros reconocimientos al obispo
El obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí, monseñor Rolando Álvarez, delegó al padre Benito Enrique Martínez Gamboa para recibir en su nombre el premio «Libertad John S. McCain 2024». Dicho reconocimiento le fue otorgado por el Instituto Republicano Internacional (IRI) el pasado 15 de mayo.
En octubre de 2023 recibió el Premio ODCA de Derechos Humanos por la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA), un conglomerado de partidos políticos demócratas cristianos del continente americano.
En noviembre de 2023 fue galardonado con el premio Carisma, por su trabajo en la construcción de comunidades desde la justicia, la paz y la solidaridad por parte de la Conferencia Española de Religiosos (CONFER).